Quizás tus dedos sean los que entrelacen mis memorias futuras, son tal vez tus manos diminutas las que impriman esos recuerdos que dejaran mi esencia en este aire, tendrás que verte al espejo, reflexionar ante los problemas que te regalaré y sin querer me odiarás por no saber comprenderte, espera, el tiempo te enseñará como lo hizo conmigo, tus ojos develarán las horas de mi vejez, tus pasos serán mi huella y tus anhelos mi condena, serán tus éxitos los divinos trofeos de calma, las caminatas y los celos que infundirán en mi tantas almas, tu camino será la estela de nuestro legado, seremos dos en uno y uno en dos, hoy tan lejos, mañana, lágrimas amargas por alguna partida que nos dolerá, tanto a ti como a mí, quizás derramaremos palabras juntos y buscaremos una solución a nuestro desespero, jugaremos por los caminos de nuestros destinos, juntos, no solos, serás el alma que levante mis manos, que arranque mis desmayos y la luz que alumbrará mi soledad acompañada, una espiral de ilusione...