Recordé palabras en un instante efímero, pasos de alcohol marcaban un camino antes recorrido y olvidé lo que mi mente divagaba, sin embargo ansiando el recuerdo, encontré el olvido, que irónico es el tiempo, sarcástico bufón de Dios, parece disfrutar con cada latido de lamentos, al fin pensé en escribir lo que mi corazón decía, no hablaba, no callaba nada, la melancolía parecía estática, los recuerdos de días pasados aparecían difusos, más allá en el tiempo que no volverá las carcajadas sonaban, un rostro del que nunca me olvidaré me saludaba, un poco confundido, quizás extrañado de coincidir en mi futuro,así han pasado las horas, inmerso en torres de cristal con aire de artificio pagando por días que no volverán, como un recluso injustamente sentenciado a vagar por los pasillos fríos de miradas inquisitorias que jamás entenderán lo que quieren decir sus sentimientos.
De ti recordaré los lagos de espera...la mirada que no buscaba mutar desde mi yo de regaladas ausencias a soportar la estadía que te acusa, no mirabas... no entregabas Descubrirte fue encontrar el mar de silencio sentirme mal al escuchar el eco de mi voz volviendo siempre cargado de palabras, de mi bullicio Me canso también de ser yo quien te escriba que mis letras no floten en ese mar de estática como pesadas placas de metal, un material vacío que pesa tanto para tus ojos De ti me despido...porque no coincidimos la distancia mina, aletarga los encuentros... poco a poco esa tierra que soplaba se apelmaza sobre la piel se hace una costra que no nos deja mover y nuestros dedos quedan a milímetros de tocarse pero nunca lo hacen...se dibuja una costa En ese espacio, mínimo entre nuestros cuerpos... ahí, el viento se convierte en un remolino creando el torbellino de nuestro dilema el que me hace escribirte en secreto... mirando nuestras estatuas de cal a lo lejos y que aún, estando junt
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